Cómo ser tu mama?

Esta pregunta apareció en mi vida en el instante que nació mi primer hijo; y con alegría y desconcierto lo abracé fuerte, intuyendo que nada ya sería como antes...

Siendo una mujer de hacerme muchas preguntas y buscadora incansable de respuestas, no supe que responderme ese día...

Hoy diecinueve años después, los miraría a ambos con ternura y te diría que lo disfrutes mucho, lo observes tal cual es, le des espacio para ser y él te va a ir contestando esa pregunta.

Me decían que iba a saber, que mi instinto me iba a guiar...mientras yo con lágrimas en los ojos, a mis treinta y tres años, dueña de una carrera y de una gran seguridad, me desplomaba en la cama intentando que su boquita y mi pezón se encontraran aunque sea unos instantes, para sentir que si podía alimentarlo...

Fue mi primera gran frustración y mi gran aprendizaje. Me llevó tiempo conectar con la intuición, soltar el miedo a matarlo...Pero me miraba al espejo y me decia" Bienvenida, ésta también sos vos. Con él naciste vos y necesitas tiempo y mucho amor para crecer desde ésta que estas descubriendo"

Y así, abrazandome a mi, pude( a mis dos hijos) abrigarlos con mi amor, alimentarlos y acoompañarlos en cada pasito... Aprendí que cuando me criticaba o juzgaba, los dejaba de ver...aprendí a escuchar lo que necesitaban ellos y deferenciarlo de lo que necesitaba yo...

Sigo aprendiendo en esa linea...

La maternidad puede ser una etapa en la vida, pero también una función que más allá de esa etapa, todos los seres podemos desplegar...Maternar es cuidar; cuidar es dar protección a lo que es vulnerable y necesita tiempo y nutrición para desarrollarse. Al maternar simultáneamente protegemos y nutrimos...sin esta función no hay supervivencia...ni posibilidad de desplegar quienes somos.

Entonces, madres hay muchas. Existen distintos formatos...madres que brindan su útero, madres que brindan sus óvulos, madres que brindan sus pechos, madres que brindan sus brazos, madres que brindan su hogar, madres que tienen un poco de cada formato..madres que brindan su corazón...

Todos estas formas de madres nutren, dan sustancia para crecer y proteger la vida destinada a desplegarse...

Y todas ellas tienen algo en comun: miedo. El misterio de la vida viene con miedo, un gran miedo.

Y si no puedo cuidar? Y si termino siendo esa madre que no quiero ser? Y si no puedo lograr ser esa madre que aspiro ser?Y si lo estoy haciendo todo mal? El miedo a fallar, a equivocarse! Porque no hay un manual a seguir! Contamos con la experiencia propia seguramente muy poco elaborada y atravesada por infinitos malos entendidos y dolores...

Y no se quiere repetir la historia o se quiere hacer un calco...

Volver a mirarnos. Mirar esa dupla que esta aprendiendo a vincularse. Darnos espacio. Ser pacientes con esa dupla del amor que se está conociendo...y dejarlos crear su propia aventura...

Durante el viaje de la maternidad, las dudas son constantes. Y mientras vamos caminando, corriendo, salticando o haciendo malabares, las dudas van dando paso a las certezas...A "nuestras certezas", esas que nacen de esa dupla del amor que continua el viaje...

Porque no existe la mejor madre del mundo, sino esa madre que fue o es perfecta para cada quien...esa dupla marcadora que nos enseñó y nos sigue enseñando desde su perfecta imperfección...

Durante nuestra vida hemos tenido distintas madres. Utero. Brazos con mamadera calentita. Mesa con un plato de comida. Espacio para descansar. Hogar donde trabajar. Trabajo. Vinculos de amigos, amgias, parejas...

Madres, abuelas, tías, jefas, amigas, escuelas, instituciones educativas, organizaciones de trabajo...

El desafio de maternar es descubrir cuándo la acción ya no es protectora ni nutritiva. Cuándo en lugar de nutrir o proteger solamente retenemos y nos apropiamos. El desafío de ser maternada/o es descubrir cuando nos quedamos en espacios que ya no nutren ni protegen, solamente evitan nuestro despliegue, cuando en nombre del "cuidado" nos impedimos SER.

Maternar implica observarnos constantemente para ser mejores madres de nosotras y nosotros mismos primero...

Entonces cuando surge la pregunta: "qué puedo hacer para que mis hijos vuelen?"...Pienso y me digo: Desplegá tus alas y volá vos primero...

Como ser tu mama?...

Siendo a la vez, mi niña...